martes, 20 de abril de 2010

Manifiesto I: Todo bien, todo en orden.

Haremos muy mal papel si nos dedicamos a quejarnos de quienes intentan vivir de acuerdo con criterios propios.
Es maravilloso ver con ojos propios, percibir y elaborar juicios evitando que la moda se interponga, ser capaces de contar lo visto y sentido, brevemente, en una frase o con una simple palabra artísticamente lograda.
 [ Así lo veo yo - Albert Einstein ]





Odio a los que se creen en el camino correcto por creer que quien ve que las cosas están como el culo, son resentidos. ¿Resentidos? ¿Qué carajo querés decir con resentido? ¿Cómo podes decirle a alguien resentido por no ser positivista? Podría decirte una y mil veces ciego. Las cosas están como el culo, basta de boludeces Cohelísticas, de frases que nadie se cree, de cadenas de Power Point con imágenes de manos y palomas del Señor, de personas que dicen que están bien pero que, están tan bien, que no pueden sostener la mirada mientras lo dicen o son los que terminan arruinandote un viernes porque tienen la necesidad de en algun momento dejar de mentirse y contarte todo. Y todo es como, en realidad, todo esta como el culo.



Basta de tener que decir todo bien, todo en orden porque sino los otros se entristecen por tu forma de ver la vida. Basta de messenger, basta de conversaciones de ascensor de horas y horas diarias. Basta de gente que se incomoda cuando decis que no pensas que las cosas vayan a cambiar. No, no creo que las cosas vayan a cambiar ¿Y, resentida es tu mejor argumento?. Cómo podrían cambiar las cosas cuando en realidad ni siqueira somos capaces de ser sinceros con nosotros mismos y contarnos el pánico que nos da estar vivos. Cuánta gente se ve a diario que dice "yo no me merezco este gobierno", pero que si puede no pagar el subte, no lo paga? Eso, mi querido amiguito, es robar en escala. Vos, con tu pretexto de que a Macri que una persona no pague el subte, no le modifica, es el mismo pensamiento que tienen los políticos, pero de manera sincera. Directamente roban y punto.



No voy a decir jamás que crea que el futuro va a ser bueno porque, con tanto egoísmo, con tanta ceguera, con tanta idiotez y mientras cohello siga siendo best seller, no va a ser posible. Es la cultura de culpar al otro, de no ver, de acallar síntomas en vez de buscar sus consecuencias. Mientras no nos demos cuenta que mucha gente no come mientras nosotros nos preocupamos por estupideces efímeras, nada va a cambiar. Tenemos la obligación de cuestionarnos y de cuestionar, nos llamen resentidos o no.



Si pensar me hace ser vista como a una resentida, bienvenido sea el resentimiento que me aleja del gris medio.  

 "Tendremos paz cuando en nuestro interior juntemos el valor necesario para decidirnos por ella"
[Albert Einstein ] 

4 comentarios:

Iván dijo...

Por cierto comparto tu pesimismo, bueno aunque en realidad no es pesimismo es una forma coherente de ver la realidad..

Hugo dijo...

Ser realista no es ser resentida, para nada.
Detesto el "si no pensás en positivo nada va a cambiar".

Hace tiempo le dí el gusto a una amiga y miré El Secreto con toda las ganas. Lo curioso es que a las dos semanas estaba viendo un noticiero deportivo y el técnico de Racing contaba que utilizaba en el plantel los métodos que se contaban en el documental.
Dirigió 3 partidos y lo rajaron, supongo que se habrá metido "El Secreto" en donde no le alumbra el sol.

Andy dijo...

Te comento rápido algo que me disparó la primer foto que pusiste de la niña desnuda en la guerra. «La nena se llama Kim Phuc es la niña de la foto. El 8 de junio de 1972, cuando su aldea de Tran Bang (Viet Nam del Sur) fue bombardeada, tenía 9 años. Abrasada por el napalm, se echó a correr por la carretera, aullando de miedo y dolor. Todo el horror de la guerra quedó captado en esta fotografía de Nick Ut, reportero gráfico de la agencia Associated Press, y su difusión en el mundo entero contribuyó a poner un término al conflicto de Viet Nam. Kim Phuc tiene hoy 38 años y vive en Canadá con su esposo e hijos. Aunque su cuerpo quedó marcado para siempre con los estigmas visibles e invisibles del napalm, ha perdonado a los que se los infligieron. En un acto conmemorativo de la guerra del Viet Nam celebrado en Washington dijo a los ex combatientes presentes que, si un día se encontrase cara a cara con el piloto que lanzó la bomba, le diría: “Ya que no se puede cambiar la historia, tratemos de hacer cuanto podamos por promover la paz”. Dicho y hecho: Kim Phuc tuvo el gesto de abrazar a John Plummer, uno de los asistentes al acto que intervino en la coordinación del bombardeo de Trang Bang.»
Una foto que refleja que está todo como el reverendo orto, muestra hoy una cara diferente. Una nena que debería estar llana de odio, contribuye a la paz. Y eso, yo pienso que eso, se debe a la capacidad de las personas de pensar que las cosas pueden ser mejores y pueden cambiar. Aunque las cosas en promedio nunca sean mejores, el hecho de que algunas personas cambien, como este John Plummer hace que le pide perdón a la niñita y adulta, contribuye aunque no se vea a lo lejos, a una pequeña transformación del mundo.

Ojalá todos fueramos como Kim Phuc!

hormiga dijo...

Andy: Si no vemos que hay problemas, si no los asumimos, no podemos cambiar nada. El decir, simplemente, que todo va a estar bien, nos saca las responsabilidad de asegurarnos de hacer TODO porque TODO este BIEN. No hay personas llenas de odio por ver que existen problemas (que son visibles). El que no queramos verlos o actuar frente a ellos, no quiere decir que no nos consuman a la larga. Cada vez estoy más segura de que quienes alguna vez pensé que tenían odio por no decir que todo estaba bien, son los que más amaban la vida. Son los que menos tratan de corromperse, para estar limpios y poder hacer ALGO.